Concebida como un camino de búsqueda de la propia luz en medio de una inmensa oscuridad, Páginas es un itinerario vital en la porfía de un vuelo hacia los universos interiores; de unas alas cortadas (de unas alas fantasma), conscientes de sí mismas e imperfectas.

La música, la menta, la lavanda, la mariposa y la libélula vibran como las cinco líneas del pentagrama en que se van plasmando la íntima voz y su intenso deseo de creación (de sonido).

Es también un espejo (como el agua) en el que se reflejan estos mundos en los que aquel espejo se refleja y es una senda de descubrimiento, de aprendizaje y lucha, de serpientes (de ciclos y espirales, de renovación), por donde va fluyendo la propia vida.