Cristo Expósito
Nacido en el seno de una familia tradicional, desde temprana edad mostró una inclinación hacia lo introspectivo y lo misterioso. Su naturaleza reservada le llevó a explorar mundos literarios y artísticos que otros rara vez se atreven a transitar. Encontró refugio en la literatura gótica, la música melancólica y las artes oscuras, hallando en ellas una resonancia profunda con su propia esencia.
Para él, la realidad cotidiana se presenta como un escenario ajeno, carente de la profundidad y el simbolismo que su alma anhela. Es en los rincones sombríos de la imaginación donde se siente verdaderamente vivo, creando y habitando universos paralelos que le ofrecen el consuelo y la comprensión que el mundo tangible le niega.
Su vida es un delicado equilibrio entre la interacción con una sociedad que apenas roza la superficie de su ser y la inmersión en sus propios pensamientos y creaciones. A través de su arte y escritura, comparte destellos de su mundo interior, invitando a otros a vislumbrar la belleza que yace en la penumbra y a cuestionar las convenciones de la realidad establecida.
Aunque su camino es solitario, encuentra satisfacción en la autenticidad de su viaje, abrazando su identidad única y la profundidad de sus pasiones. Para él, la oscuridad no es sinónimo de maldad, sino un lienzo rico en matices donde la verdadera esencia de la existencia se revela en todo su esplendor.
Sumérgete en las profundidades de « 38 velas», un poemario que emerge de las sombras del alma para iluminar los rincones más oscuros de la existencia humana. Cada poema es una llama que arde con intensidad gótica, revelando paisajes de melancolía, misterio y reflexión profunda. A través de versos cargados de simbolismo y una atmósfera envolvente, el autor nos invita a un viaje introspectivo donde la oscuridad se convierte en una aliada para desentrañar los secretos más recónditos del ser. 38 velas es una obra que desafía al lector a abrazar su propia penumbra y encontrar belleza en lo sombrío.