Me llamo Kike Ruiz y nací en Madrid un 31 de agosto en una familia humilde que aún me sigue enseñando y dando lo más valioso que tengo.
Mi vida transcurre siempre rodeada de música y de ahí mi inquietud por ella.
Soy escritor de canciones en las que hablo del aprendizaje y evolución de uno mismo. Las historias, relatos, pensamientos y versos que encontrarás en estas hojas son, básicamente, un diario al que me empujó la vida después de vivir un gran viaje donde conocí el éxito y las tinieblas de una realidad para la que no estaba preparado.
Hablo de amor porque esa es mi canción protesta.
Fue un giro repentino, o eso creo, ella desapareció de mi vida y la música me puso en mi sitio para hacerme abrir los ojos, respirar profundo y continuar el trayecto reinventándome y haciéndome ser hoy la persona en la que me he convertido, alguien mejor pero con mucho que aprender todavía.
Después de casi seis años y cuatro discos como cantante del grupo “No Se Lo Digas a Mamá” (2005-2011), pasé de la luz a la oscuridad, y después de tres discos en solitario (2012-2015-2018) sigo pensando que cada vez sé menos sobre el amor y la vida. Y eso es algo que me apasiona y me empuja a seguir despierto bajo los focos de algún escenario.